¿Por qué la ortodoncia temprana es clave en los chicos?

Los beneficios de empezar un tratamiento de ortodoncia a tiempo

La ortodoncia temprana permite corregir problemas de mordida y alineación antes de que se vuelvan graves. Al tratarlos en la infancia, los odontólogos pueden guiar el crecimiento de los maxilares y asegurar el espacio correcto para los dientes permanentes, evitando tratamientos más complejos en el futuro.

Los chicos con dientes desalineados o problemas de mordida pueden tener dificultades para masticar, hablar o mantener una buena higiene oral. Intervenir a tiempo no solo previene estas complicaciones, sino que también ayuda a que el niño gane confianza con su sonrisa.

Los controles regulares permiten detectar el momento justo para iniciar la ortodoncia. Algunos niños se benefician con aparatos como expansores para guiar el crecimiento del maxilar, mientras que otros necesitarán brackets recién en la adolescencia temprana.

¿Qué pasa en una evaluación de ortodoncia temprana?

En la consulta, el odontólogo revisa la alineación de los dientes y el maxilar, observando si hay apiñamientos, mordidas cruzadas o sobremordidas. En algunos casos se pueden indicar radiografías para evaluar cómo vienen desarrollándose los dientes permanentes debajo de las encías.

Estas visitas sirven como una hoja de ruta para planificar tratamientos a futuro, permitiendo al odontólogo diseñar un plan personalizado. Incluso si no hace falta actuar de inmediato, el seguimiento regular garantiza que cualquier problema que aparezca se resuelva a tiempo.

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